¿Quíén es Leticia Bolaño?

 

Cuando me preguntan quién soy, suelo decir que no me puedo autodefinir porque soy “lo que soy para los otros” porque concibo mi vida para y con el otro. Por tanto necesito que otro me defina para saberme yo.

Sin embargo, en este rubro sí puedo decir que soy el conjunto de historias, propias y de otros, que me marcaron y me formaron; que estoy hecha de palabras y de historias. Soy letras, palabras, sentidos y significados.

Las historias me llegaron y me llegan de todos lados. El abuelo materno era un juglar y cuando lo pienso recuerdo el timbre de su voz; los tíos paternos eran historias personificadas que se encarnaron en la piel. La escuela me llenó de historias de la voz de mi seño Ana María, de mi profe Elena. Mamá nos contaba/inventaba historias para hacernos soñar… (quiero decir, dormir). Rodearme de cientos de personas me hizo conocer cientos de historias y cada una de ellas me hizo lo que soy.

Y todavía no te conté nada de la narración…

 

Maestra por vocación, bibliotecaria por convicción y narradora por placer de  contar y contarme. La satisfacción de sentir que un cuento se apropia de mí, de mi voz es indescriptible. Sólo se puede sentir.

Empecé con un taller con Itziar Rekalde Luzurriaga, una vez, una tarde. Y no paré. “Quien decide contar cuentos entra en una vorágine imposible de frenar. Contar se convierte en un vicio” (Montero Beatriz,2010). Cuento para chicos, grandes, muy grandes, escuelas, bibliotecas. Hago cursos presenciales u on-line, talleres normales o intensivos, voy a espectáculos o festivales porque estoy convencida que ahí mismo, a la vuelta de la esquina, hay un cuento esperándome para ser contado.

Esa soy yo, Leticia Bolaño, una Leticia que tiene el vicio de contar…